Descripción

Propiedades y Usos Este aceite esencial es conocido por su eficacia contra una amplia variedad de microorganismos, incluyendo bacterias, hongos y virus. Además, actúa como un poderoso inmunoestimulante, fortaleciendo la capacidad de respuesta del cuerpo contra las amenazas infecciosas. Sus aplicaciones son diversas: Resfriados, Gripe y Enfermedades Infecciosas: Alivia síntomas y promueve la recuperación. Herpes: Aplicar en el área afectada para aliviar el ardor y prevenir las ampollas. Verrugas: Ayuda a eliminar verrugas cuando se aplica diariamente. Acné: Reduce el enrojecimiento y el dolor, acelerando la curación. Quemaduras: Calma y favorece la cicatrización. Hongos y Aftas: Combate infecciones micóticas y promueve la salud oral. Picaduras de Insectos: Alivia el malestar y reduce la hinchazón. Prevención de Piojos: Agregar al champú como repelente natural. Modo de Uso El Aceite Esencial de Árbol de Té puede ser utilizado de diversas maneras: Masaje: Diluir en un aceite portador y aplicar con suaves masajes. Pulverización: Mezclar con alcohol y agua para desinfectar ambientes. Baños: Añadir unas gotas al agua para propiedades terapéuticas. Cuidado Capilar: Agregar al champú para un cuero cabelludo saludable. Aromaterapia: Dispersar su aroma para aliviar el estrés y la tensión. Precauciones No utilizar durante el embarazo y la lactancia. Evitar contacto con ojos y mucosas. Uso tópico y externo únicamente. Descubre el poder de la naturaleza con el Aceite Esencial de Árbol de Té. Transforma tu bienestar y disfruta de una vida más saludable y equilibrada de forma natural.